Salmorejo Rebelde es un colectivo de Sevilla que defiende la justicia climática. Es un grupo apartidista que se autorganiza de manera horizontal y actúa siguiendo el principio de la noviolencia, incluyendo la desobediencia civil.
Vivimos en tiempos de una emergencia climática innegable que es síntoma de nuestra sociedad capitalista, productivista y heteropatriarcal. La emergencia climática viene acompañada por la VI Gran Extinción y una crisis social tanto dentro de nuestro país como a nivel global. Afrontar la emergencia climática y la crisis multidimensional requiere cambios profundos de nuestro sistema, economía, cultura y ética. Para nosotres, la Justicia Climática provee un marco para los cambios que deseamos.
El concepto de Justicia Climática puede ser algo ambiguo, pero para nosotres es una forma de englobar los siguientes principios que consideramos esenciales y que no sólo expresan nuestras bases y forma de definirnos, sino también las características que entendemos que deben estar presentes en la sociedad por la que trabajamos:
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Anticapitalismo y decrecentismo, ya que la emergencia climática ha sido creada por el actual sistema y este es, a su vez, un sistema basado en el crecimiento sin ningún tipo de control, por tanto, cualquier sistema que llame a sustituirlo debe pasar por otros mecanismos que permitan medir el bienestar de las personas y que no sea el crecimiento perpetuo. Entendemos, tal y como advierten los expertos, que enfrentamos además una crisis energética y de bienes comunes naturales que, unida al caos climático, originará graves conflictos y dejará a buena parte de la población en situación de vulnerabilidad extrema. Llamamos a trabajar por otros modos de convivencia construidos en comunidad, justos con todes les seres y resilientes.
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Soberanía alimentaria y energética, como posicionamiento político que reivindica el poder de los pueblos para decidir sobre los alimentos que producen y consumen. Esta demanda debe incorporar formas de producción resilientes, respetuosas con el entorno y sus seres, la colectivización de la tierra y la producción local a pequeña y mediana escala, los circuitos y mercados locales y la cooperación entre comunidades. Su objetivo es proteger el derecho a la alimentación de los habitantes de los territorios y de sus futuras generaciones. Para que esto sea posible, debe procurar no solo la producción sostenible de alimentos, sino el cuidado e integración permacultural en el entorno y la no explotación de formas de vida (humanas y no humanas).
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Antiespecismo, ya que el especismo (considerar que nuestra especie tiene derecho a llevar a cabo acciones en su propio beneficio aunque sea a pesar de otras especies que viven en nuestro mismo planeta) es uno de los factores, entre otros, que soportan la lógica de que tenemos derecho a hacer lo que deseemos en este planeta, siempre y cuando no afecte negativamente a nuestra especie. La práctica de la dominación de las no humanas y de la tierra está en la base del resto de dominaciones del sistema actual que, con su estrategia predatoria insaciable, ha puesto en riesgo la supervivencia de la vida en el planeta. Tanto por empatía como por necesidad, consideramos que la sociedad a la que transitemos debe ser antiespecista.
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Ecofeminismo: basado en dos ideas claras: las mujeres sufren más los efectos perjudiciales del cambio climático y son las que menos emisiones de gases de efecto invernadero producen + hay una conexión entre la explotación y la degradación del planeta y la subordinación y la opresión de las mujeres en nuestro sistema heteropatriarcal. El ecofeminismo pone en valor la práctica de los cuidados, sin los que ninguna especie puede prosperar, y cuestiona el espejismo de la individualidad, señalando nuestras ineludibles interdependencias y ecodependencias.
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Ecología queer: la ecología queer rechaza el antropocentrismo y la idea de que algunas vidas valen más que otras. Más allá, las ecología queer señala que la forma en que la ‘ciencia’ entiende a la ‘naturaleza’ se encuentra sesgada por las ideas cisheteronormativas. Rehúsa las asociaciones que existen entre ‘natural’ y ‘heterosexual’, y llama la atención sobre cómo la naturaleza y los grupos sociales marginalizados han sido históricamente explotados. La ecología queer destaca la complejidad de la biopolítica contemporánea, dibuja conexiones importantes entre las dimensiones materiales y culturales de asuntos medioambientales, e insiste en una práctica articulatoria en la cual el sexo y la naturaleza están atravesados por múltiples trayectorias de poder y materia.
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Decolonialismo, tanto por el respeto democrático que merecen todas las personas a su soberanía, y por extensión todos los pueblos, para decidir dentro de su libertad qué hacer o no hacer; como por el hecho de que el actual sistema económico ha favorecido llegar, en lo que conocemos como "primer mundo", a los niveles de vida que hemos mantenido en los últimos siglos (absolutamente exhorbitados y carentes de valor real en muchos ámbitos). Ello es debido, precisamente, a la explotación de los recursos situados en el Sur Global, lo que permite al Norte Global superar su "biocapacidad" disponible, necesitando, por ejemplo, aproximadamente 2,6 territorios tan grandes como el Estado español para que las personas que residimos en él , podamos mantener nuestro nivel de vida y, por tanto, generar la huella ecológica actual, lo que sería imposible si no existieran otros países de los que obtener estos recursos. El "primer mundo" está viviendo a costa de los recursos del resto del planeta y utilizando estos territorios como vertederos de residuos. Esta es una situación injusta e irracional, que nos lleva obligatoriamente hacia la opresión y el conflicto de y con otros pueblos y personas.
El sistema colonial funciona desde hace unos cuantos años. La deuda hacia países en los que se ha practicado la esclavitud, el expolio, el genocidio, la tortura, etc, es gigantesca. Esa deuda no es sólo moral, es económica, cuantificable y en algunos casos ha habido comunidades que han sido indemnizadas, Mau Mau (kenya), trabajadores esclaves Polonia, España, etc, en campos de concentración alemanes, …